Trail Moixeró 37k 2019

El año 2019 puede considerarse como el año de mi retorno a eso de correr por la montaña (TraiRunning) después de dos años "semi-retirado". A mis 46 tacos, se nota que ya no es tan fácil ponerse en forma de nuevo! Aún así, estoy volviendo a coger un nivel aceptable (aun lejos de mis mejores prestaciones hace 10 años).

Con ese nivel aceptable me presenté el domingo 18 de agosto a la Trail Moixeró 37k del 2019. Una Trail de 37 km con 2300 metros de desnivel positivo (con sus 2300 negativos, que también cuentan, que ostias).

Mapa y perfil

Una de las mejores cosas de volver a las carreras es encontrarse con amigos:

Con Fernando en la salida

Y con viejos roqueros del mundillo:

Con Agus en la salida (Él haría una más cortita)

Mi objetivo era entrenar la Ultra Pirineu (de 94 km), con lo cual debía llevar un ritmo cómodo durante todo el recorrido. Así pues salimos puntualmente a las 8:00 en el furgón de cola:

A menos de 10 minutos de partir

Go!

La primera parte de la carrera llevo un ritmo correcto, quizás un poco más rápido que el planificado, pero lo creo que lo llevo bien controlado. La calor aún no resulta preocupante y me planto en el coll de la Bena (km 12 aproximadamente) en unas 2:15 - 2:20. He ido tirando de palos desde que dejamos el pueblo.

Con el Pedraforca al fondo

Aún frescos

A partir de ahí empieza la subida más dura, los primeros 3 km son llevaderos, pasamos el coll de la Bauma y cogemos una pista hasta un habituallamiento en el km 15, al que llego unos 10 minutos antes de lo previsto y aprovecho para pasar unos minutos bebiendo y comiendo.

Tirando de palos

Control de paso

A partir de ahí empieza la subida infernal, unos 3 km con 800 metros positivos llegando a unos 2400 metros sobre el nivel del mar (pas de Tancalaporta, al oeste de la cima del Comabona). La primera mitad de la subida lo afronto en crisis. El hecho de tener que plegar los palos para preservar el parque natural quizás me afecta y reduce mi ritmo una barbaridad. Por suerte, la segunda parte me voy recuperando y consigo llegar a la cima de la carrera sólo con 15 minutos sobre mi previsión (4:15).

Encaro el descenso hacia el Coll de Pendís (km 24) con ánimo. Puedo correr bien, lo cual es de agradecer. En el habituallamiento me tomo mi tiempo de nuevo y encaro hacia el refugio Sant Jordi y luego Els Empedrats. Entre el cansancio acumulado, el terreno técnico, la patada que le pego a una piedra que me hace ver las estrellas y la calor paso mi segunda y última crisis. Veo gente bañándose en el río y no me puedo resistir a meterme yo también hasta casi la cintura! La calor es tremenda! Dejo de correr y camino.

Al llegar al habituallamiento de Vents del Cadí, al final dels Empedrats (km 29), me vuelvo a tomar mi tiempo en el habituallamiento y me recupero de mi última crisis. Tengo tiempo de sobras para hacer los últimos 8 km así que me lo tomo con filosofía y me pongo a caminar. Los últimos repechos los encaro con fuerza en las piernas y me planto en el último habituallamiento bien de fuerzas y sólo con los pies algo tocados, aunque nada grave. Saco los palos y me dispongo a hacer los últimos 3 km caminando. Y nos plantamos en la meta en 7:30, con media hora de margen y sin secuelas de importancia, que es lo que cuenta.

La clasificación no es para tirar cohetes

Preciosa carrera, con paisajes y vistas espectaculares. Un ambiente de carrera excelente, como siempre en Bagá. A poco que pueda, volveré!!!!







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